viernes, 20 de diciembre de 2013

El Abrazo ~ Terapia de amor



Según el libro “La terapia del abrazo” de Kathleen Keating:

“El contacto físico no es solo algo agradable, sino también necesario para nuestro bienestar psicológico, emocional y corporal, y acrecienta la alegría y la salud del individuo y de la sociedad. El abrazo es una forma muy especial de tocar, que hace que uno se acepte mejor a sí mismo y se sienta mejor aceptado por los demás”.

Según los expertos, el abrazar puede liberar endorfinas del cerebro y tiene maravillosos poderes curativos. Abrazar es considerado una terapia generadora de bienestar que puede reducir la presión arterial, los dolores mestruales, el dolor de cabeza, alivia la ansiedad, merma el estrés y la depresión, calma los nervios, aleja la soledad, cura el insomnio, derrota el miedo, comunica sentimientos, fortalece la autoestima, estimula los sentidos, potencia la resiliencia, desbloquea física y emocionalmente, devuelve la alegría, aquieta el alma y se ha comprobado que hasta retarda el envejecimiento y ayuda a dominar el apetito.

La duración media de un abrazo entre dos personas es de 3 segundos. Pero los investigadores han descubierto algo fantástico: cuando un abrazo dura al menos 20 segundos, se produce un efecto terapéutico sobre el cuerpo y la mente. Pues abrazar con intensión también genera alteraciones fisiológicas bastantes positivas que reducen dolores, mediante la segregación de la hormona oxitocina, también llamada la hormona del amor, ayudando a aumentar las ganas de vivir y por ende a sanar con mayor facilidad; y por si fuera poco, mejora el sistema inmunológico.

Además, el abrazar libera otras hormonas llamadas serotonina y dopamina que actúan como sedantes, produciendo una maravillosa sensación de bienestar, tranquilidad y calma no solamente en el momento de abrazar o de ser abrazado, ya que sus efectos se prolongan mucho tiempo después. Estudios científicos han descubierto que las caricias y los abrazos aportan mejores efectos en la mujer, pero el beneficio es latente en todos.

Este maravilloso tranquilizante se ofrece de forma gratuita cada vez que tenemos a una persona en nuestros brazos, que acunamos a un niño, que acariciamos un perro o un gato, que estamos bailando con nuestra pareja, cuanto más nos acercamos a alguien o simplemente sostenemos los hombros de un amigo.

A continuación resumimos algunos de los beneficios del abrazo:

Abrazar fortalece al sistema inmunológico.
Abrazar te mantiene sano, cura la depresión, reduce el estrés.
Abrazar es vigorizante, es rejuvenecedor, no tiene efectos secundarios desagradables.
Abrazar es completamente natural. Es orgánico, naturalmente dulce, sin pesticidas, ni conservadores, sin ingredientes artificiales y es 100% saludable.
Varios experimentos han demostrado que los abrazos pueden hacer que la gente tenga mejor autoestima, afectan positivamente a las habilidades lingüísticas y el coeficiente intelectual de los niños, y ayudan a mejorar la actitud mental de la persona que está siendo abrazada, así como a la que abraza.
El abrazo es una forma muy especial de terapia de contacto que contribuye significativamente en el proceso de sanación de una persona y a su salud en general.
Investigaciones sugieren que cuando una persona abraza o toca a otro, en realidad fortalece su cuerpo estimulando el nivel de hemoglobina que transporta el oxígeno a los tejidos. Cuando estos tejidos reciben oxígeno, tienen una nueva energía que continua rejuveneciendo el cuerpo.
Abrazar ayuda a disminuir las posibilidades de que se presenten síntomas de senilidad en personas mayores de 70 años.
Abrazar aumenta la vitalidad, curiosidad, capacidad para resolver problemas y en general el bienestar físico, y mejora sustancialmente el progreso en el desarrollo de un recién nacido.
Abrazar es prácticamente perfecto. No hay partes móviles, no hay baterías que se desgasten, no requiere revisiones periódicas, es de bajo consumo energético, y alto rendimiento, a prueba de inflación, no engorda, no hay pagos mensuales, no necesita seguro, a prueba de robo, exentos de impuestos, no contaminantes y, por supuesto … totalmente retornables.

¿Qué esperas? Da un abrazo, que seguro recibirás uno de vuelta.

martes, 17 de diciembre de 2013

Cuatro cosas que no debes hacer con Whatsapp


La aplicación Whatsapp ha modificado por completo el concepto del SMS, que ha quedado relegado a poco menos que un vestigio de la primera edad del móvil. Hoy ya no se manda un SMS. Hoy se whatsapea. Pero algunas acciones no deben realizarse nunca a través del whatsapp.

Existen algunas dudas sobre la seguridad que puede ofrecer un servicio de mensajería instantánea como 
Whatsapp. No se trata de dejar de utilizar esta aplicación, que es realmente útil si se usa correctamente, sino que se trata de advertir de los riesgos que determinadas acciones pueden tener si se realizan a través de Whatsapp.

Te contamos cuatro de ellas:

1. Whatsapp no es un correo electrónico. No sustituyas tu cuenta de correo por esta aplicación, porque se trata de cosas diferentes. Si comienzas a utilizar Whatsapp como cuenta de email puedes tener problemas en el futuro, ya que esta app no goza de los mismos buscadores que tienen las cuentas de email y podrías perder mucho tiempo recuperando información. Además, ten en cuenta que identificador de una cuenta de Whatsapp es un número de teléfono, por lo que es mucho más accesible para una persona ajena a tu cuenta que un correo electrónico. Utiliza Whatsapp para lo que está concebido: un sustitutivo de SMS, gratuito y mejorado, pero no como una cuenta de correo electrónico.

2. No uses Whatsapp como un sistema de comunicación corporativo. Muchas empresas con pocos empleados han adoptado Whatsapp como sistema de comunicación interna. Se hace un grupo con todos los trabajadores y ya está. A enviarse información sobre el trabajo y la empresa. Pero nos encontramos con el mismo problema: no se trata de un sistema de comunicación corporativa y no se aplican las normas de seguridad que otros sistemas sí tienen. Blackberry Messenger, por ejemplo, cuenta con un sistema de seguridad que garantiza que toda la información que se emite y recibe a través de este sistema sólo podrá ser leída por personal de la empresa. No te arriesgues a que información confidencial de la empresa circule por la red sin ninguna medida de protección.

3. No compartas contraseñas. Estas es una regla universal para protegerte en internet que ya hemos repetido muchas veces en chaval.es. Las contraseñas no se comparten. Pero mucho menos a través de Whatsapp. La razón es que una de las principales críticas sobre la seguridad de Whatsapp es el desconocimiento que se tiene sobre si la compañía guarda copias de la información enviada, dónde se aloja y qué nivel de seguridad se aplica a esa información una vez entregada. Por eso no conviene enviar contraseñas por Whatsapp (insistimos, no conviene hacerlo nunca). Además, ten en cuanta que si pierdes tu teléfono y otra persona accede a él, podría entrar en la app y ver los mensajes. Le estarías poniendo en bandeja que entrase a tus cuentas personales.

4. No envíes fotos o video comprometidos. Al igual que con las contraseñas, esto es una norma universal sobre seguridad en internet. Recuerda que cuando envías una imagen de ti mismo a otra persona, dejas de tener el control. En el caso de Whatsapp, al no conocerse exactamente dónde ni cómo se guarda esa información, el control es aún menor. El destinatario podría no hacer pública jamás esa foto y aún así tampoco estaría segura. Como norma general, no practiques el sexting. Y, por supuesto, jamás lo hagas vía Whatsapp.

Usar las aplicaciones en nuestro provecho es muy sencillo y basta con aplicar el sentido común. Por eso utilizar Whatsapp como sustitutivo de los mensajes SMS es una excelente opción. Pero no es conveniente usar Whatsapp para aquello que no ha sido concebida. Evita riesgos innecesarios y disfruta de todos los beneficios que ofrecen las TIC.

Fuente: chaval.es/

viernes, 13 de diciembre de 2013

Cinco modales que les animo a enseñar


Una persona educada es aquella que actúa de tal manera que hace que los que están a su alrededor se sientan cómodos. Esa “buena educación” se manifiesta de una manera muy concreta y práctica en lo que todavía se llaman “buenos modales“.

No sé cuál es su experiencia; la sensación que tengo en el contexto en el que me muevo habitualmente es que los modales escasean, que esto suele ser molesto y que la carencia de modales no depende de la edad.

Como padres y madres les animo a que enseñen a sus hijos estos 5 modales básicos. Parecen pocos, pero si la mayoría de las personas los practicaran, la convivencia sería más agradable. Los dirigo a las familias, sí, porque es en casa donde se deben de aprender; en la escuela los deberíamos reforzar y aumentar, pero donde se aprenden los buenos modales y la buena educación es en el hogar… y es gratis.

Los cinco modales
1. Saludar al llegar a un lugar
Cuando se llega a un lugar donde hay otras personas, como la consulta del pediatra, el ascensor de la vivienda, la panadería, la peluquería, el kiosko… se dan los buenos días, las buenas tardes u otro saludo similar.

2. Pedir las cosas “por favor“
Cualquier petición o demanda que se realiza, se le añade al principio o al final, la coletilla “por favor“. Sí, aunque estemos en nuestro derecho, sea la obligación de quién nos lo da… No abusemos del imperativo: al comprar algo, pedir a un compañero, al hacer una demanda a un miembro de la familia, a un amigo…

3. Dar las gracias
Cuando nos responden, nos atienden, nos entregan algo (aunque lo hayamos comprado), nos prestan una ayuda… damos las gracias.

4. Despedirse de un lugar
Decimos adiós, hasta luego… cuando nos vamos de un lugar donde hay otras personas, nos despedimos: a la persona de la caja que nos ha cobrado, a los pacientes que esperan la sala, al salir del ascensor…

5. Pedir disculpas
En ocasiones molestamos a otras personas sin intención: un pequeño empujón, una interrupción… Pedimos disculpas con un simple “perdone” o “discúlpeme“, o simplemente cuando nos hemos equivocado y hemos podido contrariar a alguien.

Estos son modales para practicar con todas las personas con las que nos relacionamos: extraños en la calle, vecinos, compañeros y también por supuesto, con la familia y amigos más cercanos.

Cómo enseñarlos
¿Cómo pueden enseñárselos a sus hijos? Es muy fácil, les propongo estas estrategias de sentido común:

1. Enseñarlos directamente
Enséñele cada uno de los modales directamente, por ejemplo: “mira, cuando se lleguemos a la consulta del médico, diremos bajito buenos días para saludar a la gente que está allí esperando“. “Cuando se pide algo, hay que hacerlo siempre por favor“.

2. Dar ejemplo
Si ustedes como padres y nosotros como educadores practicamos los modales, será la manera más eficaz de enseñarlos: ¡demos ejemplo!

3. Corrija si es necesario
Corregir a los niños indicándoles como tendrían que haber actuado es otra manera eficaz de enseñarles. “Cuando el señor te ha dado el helado, tenías que haberle dado gracias“, por ejemplo.

4. Elogiar cuando los practican
Por su parte, cuando su hijo o hija ponga en práctica alguno de los buenos modales, no dude en elogiarlo y reconocérselo; será la manera más concreta de indicarle cómo espera que se comporte la próxima vez.

En resumen, los cinco modales que les propongo son:

Saludar al llegar
Pedir las cosas por favor
Dar las gracias
Despedirse
Pedir disculpas
Y las estrategias para enseñarlos:

Enseñarlos directamente
Dar ejemplo
Corregir si es necesario
Elogiar cuando lo practican
Les animo de veras a poner en práctica estos cinco modales. Seguro que ustedes hechan en falta algunos más. Si es así, les pido que con sus comentarios amplíen la lista.

www.jesusjarque.com

miércoles, 4 de diciembre de 2013

25 lecciones extraordinarias del sistema educativo de Finlandia (infografía)


Claves del mejor sistema educativo del mundo

Desde que la OCDE comenzara en el año 2000 a elaborar su informe PISA, Finlandia ha acaparado los primeros puestos del podio en Europa por su excelente nivel educativo. ¿Por qué? Por estas 25 razones:

1. El profesor

Ser profesor de escuela es una de las profesiones de mayor prestigio en Finlandia.

Para ser profesor hace falta estudiar una carrera de 3 años más 2 años de máster.

Sólo un 10% de los aspirantes consigue entrar en la carrera.

Para estudiar Magisterio hace falta más de un 9/10 en bachillerato y reválida.

Se requiere además una gran dosis de sensibilidad social.

La gente pide consejo al profesor sobre todo tipo de asuntos debido a su alta preparación.


2. El método educativo

Los niños empiezan a estudiar a la edad de 7 años cuando tienen madurez intelectual.

Los 2 primeros años de cologio los alumnos van a clase 4-5 horas al día y tienen pocos deberes.

Hasta 6º de primaria los niños suelen tener en la mayoría de asignaturas el mismo maestro.

Hasta 5º no hay calificaciones numéricas para no fomentar la competencia ni las comparaciones.

La relación con el profesor es muy cercana porque no hay más de 20 alumnos por clase.

No se persigue la memorización sino la curiosidad, la creatividad y la experimentación.

No se quiere transmitir información sino que es más importante aprender a pensar.

Los profesores trabajan en grupo, buscan la participación y la retroalimentación de los alumnos.

El profesor es evaluado y recibe feedback por parte de otros profesores más experimentados.


3. Los centros educativos

Cada colegio tiene autonomía para organizar su propio programa de estudios.

La planificación educativa es consensuada entre los profesores y los alumnos.

El trabajo es integrado en los niveles del sistema educativo (primaria, secundaria y universidad).


4. Cultura educativa

En Finlandia el 80% de las familias van a la biblioteca el fin de semana.

Los finlandeses valoran la cultura luterana de la disciplina y el esfuerzo.

Los padres creen que son los responsables de la educación de sus hijos por delante de la escuela.


5. La política educativa

El gasto en educación en Finlandia fue del 6,8% del PIB en 2009 (5% en España).

La enseñanza obligatoria es gratuita desde el material escolar hasta el transporte.

En Finlandia existe estabilidad en el sistema educativo debido al consenso político existente.

El sistema social dota de numerosas ayudas para la concilación familiar y laboral.