lunes, 29 de julio de 2013

Terapia de los movimientos rítmicos


¿Que es la TMR?

La Terapia de Movimiento Rítmico son unos ejercicios basados en los movimientos que hacen los bebés desde que nacen. Kerstin Linda, es una terapeuta corporal autodidacta fotógrafa de profesión que observó los movimientos que hacían los bebés y según ello desarrollo una serie de ejercicios rítmicos, con el fin de conseguir el desarrollo  neurológico y motor y la estimulación que los bebés consiguen a través de dichos movimientos. El Dr. Harald Blomberg al tener conocimiento de que  tenía éxito con niños y adultos con discapacidades neurológicas severas decidió conocerla y tratarse. Sus resultados fueron muy buenos así que permaneció junto a ella en la consulta observando y aprendiendo su metodología de trabajo. Fruto de este trabajo el Dr. Harald Blomberg escribió el libro: “Helande Liv. Cuoiditas discendi, AB 1998”, que actualmente sólo se puede leer en sueco.

El cerebro de los bebés es inmaduro y es la parte del tronco encefálico, la que se encarga de las funciones más básicas, la que funciona correctamente mientras el resto de las partes del cerebro trabajan solo en una mínima proporción. Cada minuto en la vida de un recién nacido se generan 4´7 millones de conexiones nuevas.  Este proceso se da gracias a la estimulación que el bebé recibe a través de los diferentes sentidos, auditivo, táctil, kinestésico, visual,…siendo cogido, mecido, tocado… pero también a través de los movimientos que el espontáneamente hace. Tales movimientos se hacen en un cierto orden, de acuerdo a un programa innato. Así el bebé levantará su cabeza, el pecho, reptara, gateará….Es importante que el bebé pase por todas las fases del desarrollo pues si no habrá una inmadurez neurológica, habrá una parte del cerebro que no se habrá desarrollado adecuadamente o que no habrá recibido la suficiente estimulación.


La TMR se basa en unos ejercicios rítmicos y suaves que se hacen tanto de forma activa como pasiva y que consiguen mejorar el tono muscular o relajar las tensiones y espasticidades. Los movimientos rítmicos del bebe hacen que las diferentes partes del cerebro se conecten consiguiendo así una madurez cerebral. Con los ejercicios hay una estimulación vestibular  que incrementa el tono de los músculos extensores lo que propicia que el bebe aumente el tono muscular y pueda levantar la cabeza y su tronco por ejemplo.   
Esta terapia por si sola consigue la integración de los reflejos pero podemos conseguir la integración de los mismos de una manera más rápida trabajando con ejercicios isométricos. Es interesante poder trabajar estos ejercicios con los bebes pues así haremos una labor preventiva, y ayudaremos al bebe en su desarrollo neurológico y motor.

lunes, 15 de julio de 2013

Terapia cráneo-sacral



¿QUÉ ES LA TERAPIA CRANEOSACRAL? 

Se trata de un sistema de terapia manual suave y profundo, desarrollado por el osteopata estadounidense Dr. William G. Sutherland a comienzos de siglo.

La Terapia Craneosacral se basa en el principio de la existencia de una pulsación rítmica sutil que emerge en los tejidos y fluidos del núcleo del cuerpo, que se denomina Impulso Rítmico Craneal . Este impulso puede ser percibido como un movimiento respiratorio sutil en todas las estructuras que componen el sistema craneosacral (encéfalo, médula espinal, liquido cefalorraquídeo, meninges, huesos craneales, pelvis y sacro), y se transmite también a todos los órganos y tejidos corporales. La potencia y calidad con que emerge y se transmite este impulso a todo el organismo determina su estado de salud y vitalidad.

¿CÓMO FUNCIONA? 
Durante la sesión el cliente siente el contacto ligero de las manos del terapeuta entrenado en escuchar los movimientos sutiles del cuerpo, sus ritmos, pulsaciones y patrones de congestión y resistencia. Esta escucha proporciona información importante sobre el funcionamiento de la persona en su totalidad.

En respuesta a golpes físicos, o tensiones, problemas emocionales, etc. los tejidos del cuerpo se contraen. En ocasiones, esta contracción - sobre todo si el golpe ha sido fuerte o el trauma emocional intenso - queda contenida en el cuerpo, limitando su buen funcionamiento, y creando restricciones que provocan problemas que pueden durar años. El movimiento craneosacral las refleja como áreas de congestión o restricción. Un terapeuta entrenado puede percibirlas, identificar su origen y trabajar con ellas.

El terapeuta utiliza sus manos para reflejar al cuerpo del cliente el patrón que está conteniendo; al hacerlo, éste tiene la oportunidad de soltar ese patrón restrictivo y encontrar una nueva forma de organizarse.
El complejo cuerpo-mente es un sistema espontáneamente autoorganizado que, al recibir la información correcta de su propio desequilibrio, tiene la capacidad de equilibrarse por sí mismo.

Siguiendo este principio fundamental, el terapeuta nunca impone nada sobre el cuerpo de la persona, ni fuerza a su organismo a hacer algo para lo que todavía no está preparado. Es el mismo sistema del cliente el que lleva la directriz de su proceso de curación. El terapeuta craneosacral sintoniza con su sabiduría interna y su inteligencia corporal y sigue las pautas que le indican.

Cuando se liberan las tensiones, se libera también la energía que antes se utilizaba para mantener la contracción. Por lo tanto, uno de los beneficios de esta forma de terapia corporal es aumentar nuestro nivel de energía, pudiendo también producir una relajación más profunda.

Una parte integral de este trabajo es la toma de conciencia del propio proceso vital.

Generalmente es necesario realizar una serie de sesiones para obtener todos los efectos beneficiosos que esta terapia puede ofrecer.

¿A QUIEN PUEDE BENEFICIAR? 
La terapia craneosacral es tan suave y segura que es apropiada para personas de todas las edades, desde ancianos hasta niños y bebés, así como durante el embarazo y posparto, después de una operación, un accidente o en condiciones de fragilidad.

Al tratarse de una terapia global de todo el cuerpo, puede ayudar a las personas con casi cualquier condición, incrementando su vitalidad y permitiendo utilizar sus propios recursos de autocuración.

El énfasis del trabajo radica en acompañar a la persona a restablecer su expresión de salud.
La siguiente lista muestra algunas de las condiciones, entre otras que no nombramos, que pueden responder favorablemente a la terapia craneosacral.


• Alergias
• Alteraciones de la ATM
• Ansiedad
• Artritis
• Artrosis
• Asma
• Bronquitis
• Ciática
• Depresión
• Diabetes
• Dificultad en el embarazo
• Dolor articular
• Dolor y tensión
• Escoliosis
• Estrés
• Hernias
• Hiper o hipotiroidismo
• Hiperactividad
• Insomnio
• Lesiones deportivas
• Lumbago
• Migrañas
• Neuralgias
• Parálisis facial
• Problemas digestivos
• Secuelas de accidentes
• Sinusitis
• Zumbido en los oídos

lunes, 1 de julio de 2013

¿Qué son los reflejos primitivos?



Al principio el bebé vive en un medio acuoso dentro del útero materno donde se desarrolla y después debe de comenzar a vivir por si mismo. Para sobrevivir viene dotado de unos movimientos automáticos dirigidos desde el tronco encefálico que son los reflejos primitivos.

Estos movimientos automáticos le permiten al bebé ayudar a descender por el canal del parto, o succionar por ejemplo.

No obstante estos reflejos deberían tener una vida limitada y dar paso a los reflejos posturales controlados desde partes superiores del cerebro. Lo que permite un desarrollo neurológico.

Si estos reflejos permanecen activos habrá una debilidad o inmadurez cerebral, y afectaran no sólo a sus  habilidades motoras gruesas o finas  sino también a la percepción sensorial y cognitiva.

La integración de un reflejo supone la adquisición de una nueva habilidad, a veces  lo que ocurre es que no conseguimos que ciertos procesos se hagan de una forma automática  y se hacen a través de un esfuerzo contínuo y consciente lo que lleva a un agotamiento prematuro.

El detectar si un reflejo no está integrado nos puede dar pistas sobre la causa del problema del niño, pero si hay varios reflejos posiblemente estaríamos ante un retraso en el desarrollo neurológico y lo que podemos hacer es crear un programa de ejercicios personalizado para conseguir integrar estos reflejos no inhibidos.

Una segunda oportunidad….
Los bebés humanos hacen una serie de movimientos estereotipados durante su primer año de vida  que les permite su desarrollo. El Instituto de Neurología de Estados Unidos y de Suecia  mantienen que los patrones de movimiento especifico ejecutados durante los primeros meses de vida contienen en si  mismo un efecto inhibidor natural de los reflejos primitivos. Si estos movimientos no se han hecho, o no se han hecho lo suficiente los reflejos permanecerán activos. Pero podemos darle una segunda oportunidad al cerebro  a través de la práctica de un programa de ejercicios personalizados. Cuando integramos los reflejos  podemos observar resultados a nivel motor, académico, coordinación mano-ojo e incluso emocional.

SÍNTOMAS QUE PUEDEN DAR LOS REFLEJOS CUANDO NO ESTAN INTEGRADOS.

Ø    Dislexia y dificultades de aprendizaje
Ø    Malas posturas
Ø    Pobre coordinación mano-ojo
Ø    Poco equilibrio
Ø    Pobre coordinación
Ø    Problemas de lateralidad y movimientos cruzados
Ø    Malas posturas a la hora de escribir
Ø    Enuresis, y problemas para controlar esfínteres
Ø    Problemas de atención y concentración,
Ø    Problemas para aprender a dar la voltereta, saltar a la pata coja o montar en bicicleta
Ø    Mareo por movimiento
Ø    Problemas de comportamiento, muy introvertido y tímido o agresivo
Ø    Palabras entrecortadas, lenguaje pobre y tardío.
Ø    Hipersensibilidad a la luz, al tacto, a los estímulos visuales o kinestésicos
Ø    Mala letra
Ø    Hiperactividad
Ø    Se distraen fácilmente
Ø    Impulsividad
Ø    Problemas de organización...